Argentina pondrá en orbita un Nuevo satélite y la energía solar jugará un rol clave. Cada satélite requiere paneles solares diseñados específicamente para satisfacer sus requerimiento de energía eléctrica.
Argentina pondrá en orbita un Nuevo satélite y la energía solar jugará un rol clave. Cada satélite requiere paneles solares diseñados específicamente para satisfacer sus requerimiento de energía eléctrica.El cohete europeo Ariane 5 lanzará mañana desde la Guayana el satélite argentino de comunicaciones Arsat-2. El sátelite permitirá acceder a servicios de televisión directa (DTH), a internet para la recepción en antenas VSAT y a transmisiones de datos y de telefonía IP en América.
Un reporte de Energía Limpia XXI destaca que este es el segundo satélite de Arianespace por cuenta del operador argentino ARSAT, después del lanzamiento con éxito de Arsat-1 el 16 de octubre de 2014.Uno de los momentos claves en el lanzamiento es el despliegue de los paneles solares de los cuales se obtendrá la energía y, una vez que llegue que el satélite llegue a su órbita, el de las 3 antenas que utilizará el Arsat-2. Este satélite de comunicaciones geoestacionario y estará sincronizado con el movimiento de la Tierra, se fabricó en la ciudad de Bariloche por la compañía rionegrina Invap.
Las celdas fotovoltaicas se utilizan para abastecer de energía a los satélites. Son muy parecidas a las de uso terrestre, sin embargo son super más livianas y a la vez resistentes a las inclemencias del ambiente especial, la radiación ultravioleta, bombardeo de protones y electrones, y diversos tipos de partículas, al tiempo que deben ser lo más livianas posibles. Desde finales de los años 70’s la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) trabaja en la formación de recursos humanos para la creación de tecnología solar.