El gobierno de Nicaragua tiene previsto llevar la energía eléctrica a unas 1.400 comunidades rurales en los próximos dos años, ampliando así a un 90 por ciento el acceso de la población a ese servicio básico, informó hoy una fuente oficial.
En declaraciones a medios oficiales, la primera dama y portavoz gubernamental, Rosario Murillo, dijo que lo anterior está contemplado en un “plan nacional de electrificación” para el período 2015-2016.
Aseguró que en los últimos ocho años la cobertura del servicio eléctrico aumentó del 54 a casi el 80,4 por ciento.
Según cifras del Banco Mundial, un 26,3 por ciento de la población de Nicaragua, calculada en más de seis millones de habitantes, no tiene acceso a la energía eléctrica.
Estas poblaciones viven en su mayoría en zonas rurales alejadas de la capital, incluyendo las marginadas regiones del Caribe norte y sur.
Tras la llegada del presidente Daniel Ortega al poder, en 2007, el gobierno comenzó a dar pasos para sustituir la matriz energética, tradicionalmente dependiente del petróleo, por fuentes renovables.
Actualmente el 81,7 por ciento de la electricidad en Nicaragua se genera con energía eólica o de viento (31 por ciento), hidroeléctrica (27,5 por ciento) y geotérmica (23,2 por ciento), y el país ya ha comenzado a exportar energía de estas fuentes a Costa Rica, Panamá y Honduras.
El gobierno informó que en 2015 destinará 19 millones de dólares del presupuesto del Estado para ampliar la cobertura eléctrica en el país, y que en 2017 la meta será electrificar 300.000 casas y beneficiar a 1,7 millones de personas.
Se espera que para el año 2020 el 90 por ciento de la electricidad sea generada por fuentes renovables.